Si quieres volverte menos propenso a enfermedades circulatorios y del corazón, existen formas muy fáciles de hacerlo. Conocerlas es importante porque nos ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.
En este artículo, te enseñaremos cómo cuidar tu sistema cardiovascular y llevar una vida sana y plena.
Consumir menos sal y azúcar
Los alimentos y bebidas que contienen altos niveles de azúcar, pueden sobre esforzar la condición de nuestro sistema cardiovascular.
Pues, el cuerpo consume un determinado nivel de azúcar, el resto, es acumulado como grasa en los vasos sanguíneos, obstruyéndolos.
Igualmente, un alto consumo de sal, impide una buena hidratación de las vías circulatorias, que pierden elasticidad. Haciéndonos, propensos a la obesidad, hipertensión arterial y fatiga constante.
Evitar el alcohol y el tabaco
Ambos elementos, cuando son consumidos en exceso, son perjudiciales, pues contienen muchos radicales libres. Los cuales, son difíciles de limpiar por el sistema cardiovascular rápidamente, ocasionando irregularidades en el ritmo cardiaco.
También evita el estrés, causa del consumo excesivo de alcohol y tabaco.
Realizar actividad física
Caminar al menos media hora al día fortalece el sistema circulatorio, pues vigoriza la fuerza y velocidad de la oxigenación sanguínea.
Por lo tanto, ejercicios aeróbicos, trotar, pasear en bicicleta, escalar o ejercicios de spinning son muy benéficos.
Comer pescados, grasa buena y fibra
Los pescados azules como el atún y la sardina, frutos secos, aguacate, avena y linaza son alimentos ejemplares para una buena salud cardiovascular.
Estos, regulan la presión arterial, aceleran el metabolismo de las grasas y mantener una consistencia adecuada de la sangre.
Cocinar al vapor e ingerir frutas y verduras
Existen ciertas verduras cuyos nutrientes pueden aprovecharse mejor al cocinarse al vapor, que hacerlos en guisos o frituras.
Todos, son buena fuentes de antioxidantes, minerales y vitaminas que mantienen en buen estado a las venas, arterias y corazón.
Consumir al mínimo alimentos con colesterol
Todos los alimentos procesados, frituras y preparados con grasas de origen animal como leche, mantequilla, nata, quesos y carnes deben consumirse moderadamente.
Pues, contienen grasas saturadas, difíciles de aprovechar inmediatamente por el cuerpo y que son almacenados como grasas. Pero, en el caso de las carnes, es mejor comerlas magras.
Mejorar la postura
Encorvarse, evitar flexionar y no respirar desde el abdomen no es recomendable porque ralentiza una óptima circulación. También, es necesario evitar largos periodos de reposo y de actividad; practicar la meditación y el yoga te ayudarán en muchas formas.
Nuestro cuerpo es nuestra principal prioridad, por eso es importante mantenerlo bien nutrido y preparado. Además, mejorar tus hábitos de vida mejorará tu concentración, sensación de energía y tu humor, evitando el estrés.