El sistema locomotor es un compendio de estructuras que se unen e interactúan para hacer posible la infinidad de movimientos corporales posibles. Es muy complejo y se encuentra presente en la gran mayoría de los seres vivos.
Es una parte esencial del cuerpo humano.
El movimiento en los seres vivos
Es absolutamente necesario tanto en seres humanos como en animales tener capacidad de movimiento. Este movimiento no sería posible si el cuerpo no estuviera dotado de un sistema locomotor. La anatomía del sistema locomotor comprende un complicado complejo de estructuras óseas y musculares.
Los huesos y músculos que comprenden el sistema locomotor cumplen por sí mismos cada uno una función diferente y son todos ellos en conjunto indispensables para un rango de movimientos eficaz y fluido. Además, el sistema locomotor actúa como escudo para los órganos internos del ser humano.
Los huesos y las articulaciones
Los huesos son estructuras firmes y fuertes que crean parte del sistema locomotor y funcionan como base que sostiene al cuerpo. Los huesos se componen principalmente de calcio, que crea un exterior fuerte, y un centro esponjoso. Son uno de los principales órganos del sistema locomotor.
Estos pueden presentarse en muchas formas variadas y tamaños, existiendo así huesos tan grandes como el fémur, ubicado en la parte superior de las piernas, que puede llegar a medir casi 50 cm. Hasta los huesos del oído que miden tan sólo unos milímetros.
Los huesos se conectan entre sí mediante las articulaciones, que son estructuras móviles y flexibles, hechas de cartílago gelatinoso.
El sistema nervioso y muscular
Los nervios y los músculos son las siguientes capas que componen la anatomía del sistema locomotor. Los músculos son órganos flexibles, suaves, compuestos por fibras musculares, y tienen la capacidad de alongarse y acortarse repetidamente sin sufrir ningún daño.
Los músculos son los encargados de dar la fuerza obligatoria tanto para brindar protección a los órganos más débiles que se ubican en el interior, como para realizar las actividades que el cuerpo requiere, mientras que el sistema nervioso es aquél que envía las órdenes de movimiento que transmitimos a través de nuestro cerebro hacia el músculo.